Nada es eterno, todo se marchita incluido el amor. Estamos condicionados de los que nos rodea, ya lo dijo Marx con aquello que "el hombre es un ser social" y hasta en el amor somos prisioneros de los estándares que marcan las modas y por lo tanto los gustos. Somos producto de mercado, el cual nos condiciona y hace que tengamos contradicciones. Pero sí, amar puede ser para siempre que nuestras fuerzas nos lo permitan y no se vean perturbadas por nuestro entorno cercano.
by mmc
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